Una bolsa de almendras crudas de Mercadona o 200 gramos.
AOVE, un chorrito para la sartén.
Sal de la que quieras y más te guste.
Esta receta es de lo más sencillo y de lo más agradecido, tan simple como abrir el paquete de las almendras y vaciarlas en la sartén, previamente calentada con el aceite y un poco de sal.
Con una cuchara de madera o con una espátula de silicona, id moviéndolas mientras se van tostando. Cuando cojan un color doradito, ya las tienes para disfrutar. A mí me gustan sabrosas de sal, pero cada uno tiene sus gustos.
Si quieres hacer variaciones, prueba con pimentón, jengibre u otras especias o hierbas aromáticas, tal vez con ras el hanout. Hazlas a tu gusto, qué tal un dulce/salado con miel, de eso se trata este blog.
Por cierto, feliz año nuevo a todos.
Un saludo de Don Pepito.